Q LEAF PRO
Válvulas coronarias fabricadas con tejido de corazón animal mucho más eficaces y duraderas
De acuerdo con la American Heart Association, se espera que el coste global para el tratamiento de enfermedades coronarias graves se haya duplicado en el año 2030, alcanzando un valor de 70.000 millones de dólares. Para hacer frente a estos retos, las empresas más avanzadas conciben dispositivos médicos más eficientes y menos costosos.
En este contexto, LVD Biotech, Sensofar Medical, y la UPC colaboran en el proyecto Q LEAF PRO, con el fin de optimizar el proceso de fabricación e inspección válvulas coronarias fabricadas con tejido animal, y así mejorar su eficacia y durabilidad.
La iniciativa, coordinada por secpho, ha recibido financiación del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y de la Unión Europea-Next Generation EU, dentro del programa de apoyo a las Agrupaciones Empresariales Innovadoras, cuyo objetivo es digitalizar la industria.
En el año 2018 se implantaron con éxito en todo el mundo más de 10 millones de stents y 100.000 válvulas coronarias, y la previsión para este mercado es seguir creciendo.
La tecnología médica evoluciona rápidamente. Los sistemas de atención médica se enfrentan a desafíos críticos para desarrollar terapias mejores y menos costosas que tengan un impacto positivo en la salud y en las vidas de las personas.
De acuerdo con la American Heart Association, se espera que el coste global para el tratamiento de enfermedades coronarias graves se haya duplicado en el año 2030, alcanzando un valor de 70.000 millones de dólares. Para hacer frente a estos retos, las empresas más avanzadas conciben dispositivos médicos más eficientes y menos costosos. En este contexto cabe destacar el enorme impacto que están teniendo los dispositivos vasculares implantables, como los stents y, más recientemente, las válvulas coronarias. En el año 2018 se implantaron con éxito en todo el mundo más de 10 millones de stents y 100.000 válvulas coronarias, y la previsión para este mercado es seguir creciendo.
Más de un 30% de pacientes con estenosis aórtica severa no son aptos para cirugía, pues conlleva un riesgo muy elevado.
Una enfermedad coronaria con impacto cada vez más importante y muy frecuente (> 20%) en pacientes de edad avanzada es la estenosis aórtica severa. Esta se produce cuando la válvula aórtica del corazón se estrecha, obstruyendo el flujo sanguíneo del corazón a la arteria principal del cuerpo (aorta) y hacia el resto del organismo. Esta obstrucción puede causar problemas graves, como ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares e incluso puede llegar a provocar la muerte. Con una mortalidad que alcanza el 25% al año y el 50% a los dos años del inicio de la sintomatología, la mayoría de los pacientes son asintomáticos y realizan una progresión muy rápida.
La cirugía de sustitución valvular ha resultado ser durante muchos años una solución satisfactoria a corto y largo plazo incluso en pacientes de edad muy avanzada. Sin embargo, más de un 30% de los pacientes con esta patología nunca han sido considerados aptos para recibir un tratamiento quirúrgico, en la mayoría de los casos porque su cardiólogo considera que el riesgo es inaceptablemente alto para poder afrontar una cirugía convencional.
Una alternativa muy reciente a la cirugía convencional de sustitución valvular la aportan las nuevas válvulas coronarias (HV) sin sutura (sutureless) y las vávulas transcatéter (TAVIs). Las válvulas sin sutura permiten intervenir a los pacientes de alto riesgo de manera segura y con los mejores resultados. El proceso es más rápido, más seguro y con una menor agresión quirúrgica.
QLEAF PRO digitaliza, selecciona y valida tejidos de pericardio animal para fabricar válvulas coronarias más eficaces y duraderas.
En este contexto, el proyecto Q LEAF PRO pretende optimizar los procesos de fabricación e inspección de la parte orgánica de la válvula, es decir, de las membranas o “leaflets” con el fin de fabricar válvulas coronarias mucho más eficaces y duraderas. En concreto, se desarrolla una célula flexible e inteligente basada en sensores ópticos para digitalizar los tejidos de pericardio animal, seleccionar automáticamente las regiones óptimas para ser utilizadas como membranas o «leaflets» en válvulas coronarias bioprotésicas y proceder a su fabricación automática y control de calidad final. Con la ejecución de este proyecto, se ha permitido desarrollar un prototipo físico de la célula de fabricación, a partir del cual un posible usuario final pueda evaluar la calidad de los «leaflets» obtenidos de manera automática y, por consiguiente, validar las tecnologías utilizadas en las etapas críticas del proceso de fabricación. Además, el prototipo también ha permitido realizar una estimación de la productividad de la célula y de los costes de fabricación de los «leaflets«.